domingo, 14 de diciembre de 2014

Adios a Pedro León y otras notables ausencias.

Hace tiempo pensaba que poco a poco, sin hacer apenas ruido, con delicadeza y sigilo se nos van yendo los grandes maestros, de los que somos herederos directos. Hoy le toca el turno al entrañable Pedro León, con quien hemos compartido música y escenario, amen de conocimientos y experiencia.
Fueron y son grandes seres humanos, grandes pero humildes, generosos, a la par que profesionales.
La reflexión es que lo de "viejos maestros" nos va tocando ser a otros, y ojala estemos a la altura.